Las mañanas del fin de semana pasado, las dediqué a
empaparme de Sevilla, Redescubrí
La Catedral, repleta de obras de arte, además con cuadros de Murillo y Goya.
Paseo fotográfico disfrutando de los últimos
coletazos del verano, de la ciudad sin tráfico, el apacible descanso dominical de los sevillanos
montando en bici y
pescando en el Guadalquivir.
Un rincón que no conocía las impresionantes columnas de
Hércules.
Daba ganas de echarse una
siestecita en los
Jardines de Murillo
No quería despedirme sin callejear por mi barrio favorito:
El barrio de Santa Cruz.
A los golosos siempre nos atraen estos monumentos,
La Campana, pastelería fundada en 1885.
El lugar más animado de la ciudad(
con permiso del EBE), "La Bodeguita", en la plaza del Salvador. ¿Por qué está tan concurrido?.
¿Será por sus tapas?
Estupendo reportaje fotográfico. ¡Daban ganas de quedarse en Sevilla! ¿A qué sí? ;)
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