Mutua Madrid Open 2011, Final Nadal-Djokovic y Jornada del Martes.

El domingo, no fue el día de Nadal que no jugó su mejor tenis ante un genial Djokovic, ni tampoco el nuestro; A mí, no me dejaron entrar los bocatas escondidos debajo del abrigo y Antonio olvidó la tarjeta de la cámara de fotos, aún así, aquí se puede ver el reportaje fotográfico de las finales (los álbumes anteriores: 3-5-2011 y 1-5-2011).

Los partidos anteriores, tanto el de dobles repitiendo ganadores, Los Bryan, como los individuales femeninos (Azarenka vs Kvitova), jugadoras con un tipo de juego similar y tan siamesas como los gemelos americanos, no aportaron ninguna emoción.

Menos mal que lo salvo el gran partidazo que hizo Djokovic y la gran remontada de Nadal del primer set, que hizo que el estadio entero vibrara y los nervios se tensaran. El dicho que la suerte va con el ganador, se cumplió y el último juego del set, a Novak le toco en la ruleta.

Al comienzo del segundo set, Nadal nos dejo su espectacular "willy".



Si el revés de Nadal hubiese funcionado mejor y ganado el segundo set, no se si "Nole" habría aguantado todo el partido, ya que hacia un esfuerzo muy grande saltando para devolver cada golpe.

El martes, gracias a la viajera Laura de Viaje al Atardecer, nos regalaron una entrada Vip de Lexus. A primera hora de la tarde, un partido que prometía diversión e implicación del público madrileño, Verdasco vs Lu. Un mal espectáculo por parte de Verdasco, fuera de partido en todo momento, que en su ciudad continúa sin lucirse.

Paseando por las pistas exteriores estaba Juan Ignacio Chela, amigable y muy simpático. Tuvimos una breve conversación acerca de los jugadores argentinos, el me preguntó si me gustaba Mariano Zabaleta (co-presentador con Chela de Tenis pro), le dije que mi preferido es Nalbandian con su toque de "manita".

Tomas Carbonell, que también estaba allí (manager de Verdasco), accedió a formar parte de mi colección de tenistas-comentaristas de televisión.

Al año que viene, más y mejor. Y con el deseo que la norma absurda de no dejar pasar comida al recinto desaparezca.